sábado, junio 28, 2008

El día en que casi vi el túnel

Fue un jueves en la noche. Estábamos en mi departamento, con la Savita, la Mónica y la Pame, la novia de América, la nueva Lucerito, celebrando su anillo de compromiso, la nueva casada de mis amigas, y además, mi nuevo departamento. Gracias a la influencia de la Anita, ahora tomo cerveza, así que me tomé dos entre conversa y conversa, mientras mis amigas bajaban las botellas de pisco sour ligth. Hablábamos de la vida, comíamos papas fritas, pero casi todo giraba en la enorme sonrisa de la Pame, que siempre ha sido buena para sonreir y en el anillo que lleva en el dedo de al medio, que no sé cómo se llama, porque le queda un poco grande.
Y así pasó la noche, y a las 2 am se fueron. Y yo partí a mi cama. Prendí el scaldasono, uno muy viejo, que podría ser parte del museo antropológico, tan viejo que cuando me lo compraron era un lujo. Aún recuerdo ese día en Almacenes París, cuando todavía no se llamaba París y estaba con mi mamá. Yo quería que me comprara el scaldasono y un abrigo. Me dijo que eligiera uno de los dos. Así que elegí decirle que no al guatero y pasar de largo el abrigo.
Pasaron los años y el scaldasono me acompañó muchos años. Diciéndole que no a las instrucciones, lo dejaba puesto en mi cama todo el año. Grave error.
Pero bueno, esa noche hacía frío y antes de quedarme dormir con la tele prendida, como siempre apagué la huifa. Y dormí con los angelitos. Dormí como tronco, hasta que me dio frío y se me ocurrió prender de nuevo el scaldasono. Seguí atrapada por el sueño. Dormí mucho rato y tengo el recuerdo de haberme despertado en medio de la noche porque sentí un olor raro. No es como lo cuenta la Chumi, una de las amigas con las que comparto departamento, que dice que me desperté cuando sentí olor a pan tostado. Recuerdo que sentí un olor raro, y pensé, qué raro, si yo igual duermo con la puerta cerrada. Saqué la mano de la cama y apagué el scaldasono. Y seguí durmiendo feliz.
El viernes en la mañana me desperté full temprano, me bañé y lavé todos los vasos, copas, platos, ceniceros y toda la huifa de la noche anterior. Ordené el comedor. Me sobraba el tiempo que hasta alcanzaba a cocinar un kuchen de manzana antes de irme a trabajar. Ya tenía todo impeke, como dice la tele, así que fui a hacer mi cama.
Seguía contenta. Saqué el plumón. Corrí mi frazada chilota y horror! veo la sábana quemada. Doble horror, la otra sábana quemada. Triple horror el colchón quemado. Tuve 30 segundos de mudez, algo demasiado raro en mí. Qué onda? pensé, seré la nueva pirekinésica del sur. Tengo poderes sobrenaturales. Soy niña indiga. Que venga Carlos Pinto a hacerme un reportaje ahora ya! y cuando por fin pude hablar, gritaba como loca Dani, Dani, Dani, llamando a mi otra amiga del dpto.
Se me había incendiado la cama y yo no me había dado cuenta. Mirábamos con pánico mi box spring heredado de una prima que se casó y no podíamos decir nada. Y lo peor vino cuando revisé el pantalón de mi pijama... estaba chamusqueado!!! Me estaba quemando mi pernil izquierdo y no sentí la llama!!! Ahora entiendo para qué sirve tener las piernas gordas.
Así que soy como los cazadores de mitos. Sí, los scaldasonos se incendian.

11 Comments:

Anonymous Anónimo said...

De la que nos salvamos!!!
Yo seguiré contando la historia a mi manera, que creiste que era olor a pan tostado, jajaja.
Besos... CHUMI.

julio 02, 2008 9:02 a. m.  
Blogger Fernanda said...

Jajaja yo le tengo pavor a esas cosas, y te salvaste de que no pasó a mayores! esas cuestiones pueden dejar la mansa crema. Por eso yo no me he comprado nunca de esas cosas y no pretend comprarmelas, si cuando una está solita el guatero igual salva!

julio 02, 2008 7:01 p. m.  
Blogger Nutela said...

pero mijita, cómo lo deja en su cama todo el año?!!!

yo no soporto el invierno sin mi scaldasonno, pero el invierno no más.

julio 08, 2008 6:41 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

jajaja romii!!! tanto tiempo!!
como hay estadoo linddaa??
oye oye! yo toda mi vida he querido un scaldasono y no lo he obtenido, ahora empiezo a creer que ha sido cuestion de suerte no tener.. gracias por tu mito revelado!!
ahora confio en mi guatero (aunque el otro dia a mi nana se le revento uno en la cama, te habiapasado algo similar? jaja)
ya no se puede confiar en nada.
son tiempos dificiles, ni los tostadores duran mas de un mes!
muchos besos.
que tal tu pega? todo bien??

julio 24, 2008 11:43 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Porque ya no escribesss???

agosto 07, 2008 6:57 a. m.  
Blogger Bárbara said...

Buf, que susto!!! Yo a lo más me he despertado en medio de un sauna, tipo 4 de la mañana, porque me quedé dormida con el aparato encendido...menos mal que no pasó a mayores
Un abrazo!

agosto 14, 2008 1:42 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

te extrañamos!!!!!

agosto 19, 2008 8:26 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Romiii, qué pasa con tu blog!!! Vuelve por fis!!!
Pame

agosto 25, 2008 3:24 p. m.  
Blogger GRG said...

Eres mi escritora favorita...keep amazing me

agosto 30, 2008 2:09 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Romi tu eres un artista que se debe a su publico, por fa no nos abandones...
besos
Barby.

septiembre 07, 2008 2:03 p. m.  
Blogger Unknown said...

llegue hasta tu blog, por el tema de un home shower, y empese a leerrr leeeerrrrr y leeerrrrrrrrrrrr q ya creo me lo lei completo! eres muy divertida para escribir, dejare tu blog grabado en mi pc y espero q sigas escribiendo, q las ultimas historias son del 2008 y estamos en el 2011... escribiras mas? saludos...mona!

febrero 18, 2011 12:52 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home