Llegue, pase y mire...

Admito que ayer el día estuvo increíble! Mirando un posteo caché que estaba en La Cuarta. Lo primero que pensé que aparecía una foto mía en la Bomba 4 y casi me colapsé. Cuando descubrí que el amable señor Brito me había nombrado fue como si hubiese estado nominada al Oscar, así que me puse a llamar como loca a todos los que me conocían. Claro que con mi mamá tuve que empezar desde el principio y entrar a explicarle lo que era un blog!! no entendía nada. Al final me cambió el tema y me pidió que le buscara una receta en internet para hacer un pato y que la llamara para darle los ingredientes. Nooo!! Me cambió por un pato!

Como mi ego estaba por la nubes me lancé a mandarle mails a mis amigas para contarles la fama que estaba alcanzando. Todos se paletiaron en verdad y me mandaron millones de felicitaciones. Hasta mi papá se metió a leer el blog (que me dio un poco de vergüenza) y me pidió que le imprimiera lo que salía en La Cuarta. Creo que ahora es mi diario favorito.

Así que me pasé el viernes jurando de guata que me había ganado el premio Politzer.

También llamé a Brito y le di las gracias. Yo creo que pensó que soy harto hueca, porque lo único que hacía era reirse de las estupideces que le dije en el minuto y medio que hablamos. Me cayó muy bien. La Josefa me pidió que le cachara la voz para ver si estaba dentro de nuestro público objetivo, pero a mi me pareció un poco mayor, pero muy simpático y eso estuvo muy bien.

Como estaba de cumpleaños la Gaby la fuimos a saludar. La Gaby es manager un grupo de música que se llama Rako y que tocó anoche en su cumpleaños. Su música es rara, y no se escuchó muy bien, pero estuvo bueno. En realidad, de música yo no cacho mucho, pero analizando los comentarios de los invitados, creo que estuvo re bien. Y el asunto es que también me felicitaron por mi aparición en el diaro popular. Anoche me sentía muy estrella.

Estuvo top!

Y me di un gusto y partí esta mañana a Patronato con la Andrea a ampliar un poco el closet para la temporada primavera-verano. Había mucha gente y me moría de ganas de comprarme una empana en la calle, un pedazo de piña y un jugo natural. Pero me contuve, para que la Andrea no pensara que soy una cerda para comer, sobre todo porque dos veces en las que me ha invitado a su casa no he podido porque me ha dado gastritis por comer demasiado.

Esto está de lo mejor.

Espero no guatear. Hay que seguir suiendo el rating.